Como base para este artículo partiremos de la clasificación más simple que se puede hacer de los pedos y que los divide en dos grandes grupos: los «… por Dios que nadie lo huela» y los «¡¡¡ este para el que venga detrás !!!».
Esta clasificación es el fruto de la observación de situaciones muy distintas y ahora, gracias al estudio de estos orientales, podremos tener un amplio abanico de movimientos para maximizar el radio de acción de nuestro pedo y otros para alejarnos lo mas posible y así disimular mejor.
El vídeo no tiene desperdicio y espero que lo disfrutéis tanto como yo.