Archivo de la categoría: Elucubraciones

¡Cómo pasa el tiempo! Es hora de volver a escribir

¡Cómo pasa el tiempo! es hora de retomando el camino...

Ya hace siete años desde que escribí mi último artículo en este blog. Cinco desde que tuve que suspender el servicio por problemas técnicos. O estás pendiente o los años se nos van entre los dedos de las manos. Lo único que se me viene a la cabeza es ¡cómo pasa el tiempo!

Son muchas las ocasiones en las que me he planteado volver a escribir, pero siempre he encontrado algo prioritario o me he puesto cualquier excusa. Sentarse delante de un artículo en blanco y derrochar imaginación no es moco de pavo. Cuando no tienes humor para nada, el esfuerzo puede hacer que prefieras posponer el regreso.

Pero todo llega y este es el momento. Retomo el camino con humildad. Con humildad para agradecer los elogios y aprender de las críticas.

Sé que me lo voy a tomar con calma, porque quiero disfrutarlo tanto como lo disfruté cuando empecé. No quiero que escribir se convierta en una obligación, por lo que os pido que tengáis paciencia. Los artículos irán apareciendo cuando encuentre algo interesante y espero que los disfrutéis tanto como en el pasado.

Para los que me conocéis ya sabéis cual es la temática de este sitio. Para los que os incorporáis, os invito a leer las entradas anteriores que fijo que más de una os arrancará una sonrisa. En cualquier caso intentaré seguir fiel a mis orígenes.

Voy a retomar esta andadura y lo haré como lo he hecho en otras ocasiones, rascando la superficie e investigando para no quedarme en lo obvio. También os invito a que comentéis y aportéis ideas, así este blog será un poquito de todos.

Por último comentaros que intentaré mantener la constancia para que el blog prospere, para no tener que mirar hacia atrás otra vez y decir:

¡Cómo pasa el tiempo!

¡Feliz y próspero 2015!

Made with Blender

Otro año que personalmente se me ha escapado entre los dedos de las manos sin darme cuenta y haciendo balance la pregunta que hay que plantearse es ¿este año ha sido bueno o malo?.

Tal y como están las cosas (económicamente hablando), no se puede decir que haya sido un «gran» año, pero hay tantos momentos buenos, rodeado de los que me quieren, de grandes amigos, de compañeros excepcionales, de risas, de ilusiones, de sueños y en general de pequeños matices que hacen que este años me deje un sabor dulzarrón en el paladar.

Sería un ingrato si no le diese las gracias en primer lugar a mi familia, que hace que mi vida sea maravillosa y que merezca vivirla sin desperdiciar ni un segundo. A mis amigos, a los que tengo que querer, porque son ellos. A esa manada de locos compañeros con los que comparto el día a día y logran hacerme reír, disfrutar y que son una inspiración para superarme como persona y a todos los que en algún momento se han detenido a compartir un trocito de su vida conmigo (aunque sólo sea leyendo mis artículos en este blog).

Esta noche, voy a despedir el año con una gran sonrisa, porque tengo la firme creencia de que hay que cerrarlo con un broche que haga honor a todo lo bueno que he pasado y dejar que lo malo se disuelva en el olvido.

A partir de mañana empiezo una carrera de 365 días en los que si lo doy todo, si disfruto de cada momento y si lo comparto con los que me rodean, estoy convencido de que llegaré a la meta pudiendo decir que ha sido otro año estupendo.

Y creo que sólo me queda una cosa por hacer, y no es más que brindar con todos vosotros y desearos…

¡Feliz y próspero 2015 a todos!

Un nuevo amanecer

¡Ya han pasado más de cuatro años y en este tiempo no he publicado ni una sola entrada!.

Tal vez la frase sea «demasiado tiempo», pero unas por falta de éste, otras por falta ganas, otras por necesidad, otras por trabajo, el caso es que al final tenía medio abandonado el blog, y esto es algo que tenía que cambiar.

Digamos que tras un nuevo desastre en el servidor (ciertamente tengo muy mala suerte con los equipos), se me abrieron los ojos con respecto a lo dejado que tenía esta faceta de mi vida. Me puse manos a la obra y me ha tocado montar un servidor nuevo, lo que tiene una serie de implicaciones tales como, cambio de hardware, reconfiguración del sistema operativo, y ya puestos, por qué no, cambio de sistema de blog. En resumidas cuentas, un montón de cambios.

Con las ganas renovadas y un nuevo aspecto retomo esta aventura y he comenzado por lavar la cara al blog, pero manteniendo las entradas que con tanta ilusión escribí en su momento. Esto ha supuesto un esfuerzo, pero un esfuerzo que creo que ha merecido la pena.

Han cambiado muchas cosas en mi vida, unas para bien y otras no tanto y aunque ahora dispongo de mucho menos tiempo que cuando me adentre dentro de este mundillo, voy a hacer un esfuerzo para intentar que las publicaciones sean constantes.

Quiero agradecer a todos los que en algún momento me han leído, a los que me seguían fielmente e invitar a todos los que navegáis por la red a que os detengáis un momento en este, mi rincón, para que compartamos esas cosas que me encuentro o simplemente mis reflexiones.

Tal y como lo veo ahora, esto es un nuevo amanecer que me muestra un camino que aunque no es del todo desconocido, esconde muchas sorpresas y espero descubrirlas con todos vosotros.

¡Allá vamos!

Engañando al estómago

En primer lugar, agradecer a un gran amigo que aunque «dice» que nunca lee blogs (gracias por leernos), nos envía estas joyas, que nos permiten hablar de temas bastante serios en clave de humor.

En segundo lugar, comentar para evitar que alguien se sienta ofendido, que no se critica a nadie en concreto. La crítica va directamente enfocada a la tendencia actual gastronómica y por supuesto, entendiendo siempre que es mi opinión (aunque cada vez veo más gente que la comparte). Una vez dicho esto nos metemos en faena.

Fue Miguel de Unamuno el que dijo «el progreso consiste en renovarse». Esta máxima es aplicable a todos los campos, y la cocina no es una excepción, donde la experimentación sobre nuevos sabores, texturas, etc, etc, etc… hace del arte culinario algo vivo y todo esto está muy bien hasta que empiezan a tomarte el pelo.

Sigue leyendo

Volviendo a la vida

Volviendo a la vida

Que puedo decir, te levantas el día 7 de enero con la resaca de los reyes y te hacen el típico comentario sin importancia ‒pues no tenemos Internet…‒ y lo primero que piensas es que el 28 de diciembre ya pasó hace unos días, con lo que inocentada, inocentada… no va a ser.

Te pones a mirar, pensando en que se habrá colgado el router o que algún cable de la maraña se habrá desconectado o vete tu a saber qué, cuando de repente te das cuenta de algo: «en esta habitación antes había más ruido».

  • El diagnóstico: La fuente de alimentación del servidor a tomar por #@!#@…
  • La solución: Tras dos días y pico, comprar fuente nueva compatible, instalarla y ver que todo está correcto.
  • El resultado: ¡Ya estamos aquí dando guerra después del susto!

En fin, que siento las molestias que os haya podido ocasionar y que espero estar por aquí para poneros la cabeza como un balón de Nivea.

¡Feliz 2010!

¡Feliz 2010!

Otro año que se nos escurre entre los dedos de las manos y como reza el dicho popular «año nuevo, vida nueva», pues he decidido que ya iba siendo hora de cambiar un poco el aspecto del blog.

Con respecto a los contenidos del mismo, me temo mucho que la tónica general será la misma, lo que animará a leerlo a algunos y decepcionará a todos aquellos que piensan que a mis años YA debería sentar la cabeza.

Mi propósito para el año que empieza es tan simple como currar lo necesario, lo que me permitirá tener tiempo para realizar cosas más interesantes, como pasarlo fenomenal con mi familia y amigos, intentar escribir artículos con más frecuencia que el año pasado (aunque tengo que decir que cada vez es más difícil encontrar algo interesante que merezca la pena postear) o sacar un poco más de tiempo para mi, que tengo muchos hobbies muy abandonados.

Por último, desearos que los Reyes Majos os dejen muchas cosas o por lo menos lo que hayáis pedido y si eres de esos optimistas que todos los años ponen en su carta algo del palo ‒un Lamborghini‒ o ‒un chalet en la Moraleja‒, recordaros que estamos en crisis y que no es suficiente con ser buenos y empezar/terminar todas las frases con un «osea».

Feliz noche de Reyes y recordad que además de la copita y los dulces navideños para los Reyes, no estaría de más algo de lechuga y agua para los camellos, que al final son los que cargan…